Hace unos años, un grupo de jóvenes aventureros y soñadores, pero consientes de su responsabilidad y del futuro, iniciaron un camino. Empezaron a caminar convencidos de que: si queremos vivir en un país prospero y poderoso, nosotros tendremos que construirlo y desde ahora.
Así empezó a construirse ese camino en el cual nosotros estamos, ese camino empezó su recorrido con jóvenes y desde los jóvenes.
Seamos realistas, nosotros somos la fuente generadora de cambio, la fuerza renovadora del país, somos la esperanza de un mejor futuro, somos y seremos el resultado de nuestras acciones y decisiones de hoy.
Nosotros no arrastramos odios ni espíritus partidistas, estamos consientes que el camino y el futuro nos une, además constituimos una nueva generación con una realidad difícil y un futuro incierto, por eso debemos prepararnos y liderar desde hoy la construcción de un mejor país.
No podemos darnos el lujo de dejar en manos extrañas las decisiones y la conducción de nuestro futuro, hoy somos jóvenes y mañana debemos convertirnos en esa maquinaria política, económica, académica y social, una verdadera columna vertebral que impulse un desarrollo colectivo y el liderazgo de nuestro país mediante nuestras ideas y acciones.
¡No se puede! Dirán muchos, con una firme decisión y planificación se puede construir el país que todos soñamos, para ellos necesitamos:
1.- jóvenes talentosos, que poco a poco vayan ingresando y liderando las principales instituciones del desarrollo de nuestro país y ahí dentro su responsabilidad será convertir dichas instituciones en instrumentos del desarrollo y la misión nacional.
2.- Estimados amigos, si antes los países se hacían fuerte con lanzas y flechas, hoy se hacen fuerte con empresas y productos con capacidad de acción mundial, por ello necesitamos orientar nuestro esfuerzo en la identificación, fortalecimiento y consolidación de una economía nacional con valor agregado y con nuestra ayuda poco a poco conquisten mercados mundiales.
3.- Necesitamos limpiar nuestras fuerzas armas de ideas y personas nefastas para el desarrollo y nuestra misión, no hay países poderosos sin una fuerza militar fuerte.
4.- Construir el equilibrio social, o justicia social mediante las reformulación y reorientación de los programas sociales con un enfoque sistémico y productivo, y la lucha frontal contra el fenómeno que genera pobreza y un sistema económico y productivo que incluya a todos.
5.- Somos una generación más evolucionada, somos los llamados a frenar y superar el encasillamiento ideológico reduccionista y conflictivo de derechas e izquierdas, mediante una mirada sistémica del mundo, es decir ellos ven sólo una parte de nuestra sociedad y es válido, pero los sistémicos debemos ver el todo y también las partes, así sabremos mejor qué camino tomar y será el más optimo para la construcción del equilibrio social, la cooperación y liderazgo económico y político al cual aspiramos.
¡Si hoy eres joven, súmate al camino!.
Así empezó a construirse ese camino en el cual nosotros estamos, ese camino empezó su recorrido con jóvenes y desde los jóvenes.
Seamos realistas, nosotros somos la fuente generadora de cambio, la fuerza renovadora del país, somos la esperanza de un mejor futuro, somos y seremos el resultado de nuestras acciones y decisiones de hoy.
Nosotros no arrastramos odios ni espíritus partidistas, estamos consientes que el camino y el futuro nos une, además constituimos una nueva generación con una realidad difícil y un futuro incierto, por eso debemos prepararnos y liderar desde hoy la construcción de un mejor país.
No podemos darnos el lujo de dejar en manos extrañas las decisiones y la conducción de nuestro futuro, hoy somos jóvenes y mañana debemos convertirnos en esa maquinaria política, económica, académica y social, una verdadera columna vertebral que impulse un desarrollo colectivo y el liderazgo de nuestro país mediante nuestras ideas y acciones.
¡No se puede! Dirán muchos, con una firme decisión y planificación se puede construir el país que todos soñamos, para ellos necesitamos:
1.- jóvenes talentosos, que poco a poco vayan ingresando y liderando las principales instituciones del desarrollo de nuestro país y ahí dentro su responsabilidad será convertir dichas instituciones en instrumentos del desarrollo y la misión nacional.
2.- Estimados amigos, si antes los países se hacían fuerte con lanzas y flechas, hoy se hacen fuerte con empresas y productos con capacidad de acción mundial, por ello necesitamos orientar nuestro esfuerzo en la identificación, fortalecimiento y consolidación de una economía nacional con valor agregado y con nuestra ayuda poco a poco conquisten mercados mundiales.
3.- Necesitamos limpiar nuestras fuerzas armas de ideas y personas nefastas para el desarrollo y nuestra misión, no hay países poderosos sin una fuerza militar fuerte.
4.- Construir el equilibrio social, o justicia social mediante las reformulación y reorientación de los programas sociales con un enfoque sistémico y productivo, y la lucha frontal contra el fenómeno que genera pobreza y un sistema económico y productivo que incluya a todos.
5.- Somos una generación más evolucionada, somos los llamados a frenar y superar el encasillamiento ideológico reduccionista y conflictivo de derechas e izquierdas, mediante una mirada sistémica del mundo, es decir ellos ven sólo una parte de nuestra sociedad y es válido, pero los sistémicos debemos ver el todo y también las partes, así sabremos mejor qué camino tomar y será el más optimo para la construcción del equilibrio social, la cooperación y liderazgo económico y político al cual aspiramos.
¡Si hoy eres joven, súmate al camino!.
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